Tu entrevista de fisioterapeuta: el código de vestimenta que te abrirá las puertas

webmaster

물리치료사의 취업 면접 복장 - **Prompt:** A confident female physiotherapist, in her late 20s to early 30s, seated at a modern des...

¡Hola, mis queridos futuros fisioterapeutas y profesionales de la salud! Sé que muchos de ustedes están a punto de embarcarse en esa emocionante, pero a veces intimidante, aventura de las entrevistas de trabajo.

¿Y qué es lo primero que nos viene a la mente después de preparar el currículum? Exacto: “¿Qué me pongo?”. Especialmente en una profesión tan dinámica y “de manos a la obra” como la fisioterapia, donde la comodidad es clave en el día a día, elegir el atuendo perfecto para impresionar en la entrevista puede parecer un verdadero rompecabezas.

Es una duda muy común que me plantean una y otra vez, y es completamente válida. Créanme, en mi experiencia, he visto de todo y he ayudado a muchísimos profesionales a brillar en sus entrevistas.

No se trata solo de verse bien, de seguir una tendencia de moda efímera; se trata de transmitir confianza, profesionalidad y esa chispa única que te hará destacar entre la multitud.

La primera impresión es crucial, amigos míos, ¡y tu vestimenta habla volúmenes sobre ti antes incluso de que pronuncies una palabra! Recuerden que los reclutadores buscan a alguien que no solo tenga las habilidades técnicas, sino que también encaje con la imagen y los valores de la clínica o institución.

Esto significa un equilibrio perfecto entre mostrar quién eres y demostrar que entiendes el entorno profesional. Pero tranquilos, no estamos hablando de un desfile de alta costura, sino de estrategia pura para que tu personalidad y tus habilidades sean el centro de atención, sin que la ropa se interponga o, peor aún, reste puntos.

Hoy en día, la línea entre lo formal y lo “inteligente casual” puede ser borrosa, y saber cómo navegarla específicamente para una entrevista de fisioterapia es clave.

La tendencia actual apunta a la autenticidad bien presentada. En este post, vamos a desgranar juntos todos esos secretos para que tu look de entrevista como fisioterapeuta sea impecable, moderno y, lo más importante, ¡te haga sentir invencible!

Desde los colores que proyectan autoridad y cercanía, hasta los pequeños detalles que marcan una diferencia gigante en el competitivo mundo de la salud.

Prepárense para transformar esa duda en una ventaja, porque les aseguro que una vestimenta adecuada puede abrir muchas puertas y dejar una huella imborrable.

¡No se pierdan estos consejos que harán que el reclutador piense: “Este/a es el/la nuestro/a”! Aquí abajo, vamos a descubrir exactamente cómo lograrlo.

La Primera Impresión Que Deja Huella: Más Allá del Currículum

물리치료사의 취업 면접 복장 - **Prompt:** A confident female physiotherapist, in her late 20s to early 30s, seated at a modern des...

La Importancia de lo Visual

¡Ah, la entrevista de trabajo! Ese momento crucial donde, en cuestión de minutos, tenemos que demostrar todo lo que valemos. Y sí, aunque parezca mentira, mucho antes de que empecemos a hablar de nuestra formación académica, nuestra experiencia con pacientes o nuestras habilidades manuales, ya estamos comunicando un montón de cosas. He visto a muchísimos candidatos con currículums brillantes, pero que por no cuidar este detalle tan básico, no lograban pasar el primer filtro. Créanme, los reclutadores no solo buscan un buen fisioterapeuta en términos de conocimiento; buscan a alguien que represente bien su clínica, que inspire confianza a los pacientes desde el primer momento. Y eso, mis queridos amigos, empieza por cómo nos presentamos. Es como la portada de un buen libro: si no atrae, es difícil que alguien quiera leer el interior, por muy bueno que sea. En mi propia trayectoria, he aprendido que no se trata de vestir caro o seguir la última moda, sino de vestir con intención y respeto hacia la oportunidad que se nos presenta.

Tu Vestimenta Como Carta de Presentación

Piensen en su atuendo como una extensión de su profesionalidad. Es la primera frase de su historia personal que le cuentan al entrevistador. Si mi ropa está descuidada, arrugada, o no es adecuada para el contexto, ¿qué mensaje estoy enviando? Pues probablemente que soy una persona poco detallista, que no le da importancia a las cosas o que no se toma el proceso en serio. Y eso es lo último que queremos, ¿verdad? Recuerdo a una colega que siempre decía: “Vístete para el puesto que quieres, no para el que tienes”. Y aunque a veces suena un poco cliché, ¡tiene toda la razón! En el mundo de la fisioterapia, donde el contacto físico es constante y la empatía es fundamental, proyectar una imagen limpia, ordenada y accesible es más importante de lo que muchos creen. Es un reflejo de tu compromiso, tu seriedad y tu respeto por la profesión y por tus futuros pacientes. Es tu oportunidad de brillar desde el segundo uno.

Descifrando el Código de Vestimenta: Elegancia Funcional para Fisioterapeutas

¿Formal o Smart Casual?

Aquí es donde a menudo surge la gran pregunta: ¿necesito un traje de chaqueta y corbata, o puedo ir un poco más relajado? En mi experiencia, y viendo cómo ha evolucionado el sector, la respuesta no es un rotundo sí o no. Depende. Por lo general, en fisioterapia, el “smart casual” o “elegante informal” suele ser la opción más segura y adecuada. Esto significa un punto medio entre la formalidad excesiva y la informalidad total. Para los hombres, esto podría ser un pantalón de tela (chino o de vestir) con una camisa (de manga larga o corta, según la estación) bien planchada, quizás un blazer si el clima lo permite o si quieres darle un toque extra de sofisticación. Para las mujeres, un pantalón de vestir o una falda a la altura de la rodilla con una blusa elegante o un suéter fino. La clave es que se vea pulcro, profesional y que no restrinja tu movimiento. No olvides que, aunque sea una entrevista, estamos hablando de una profesión donde la movilidad es importante.

Adaptándose al Entorno Clínico

Antes de elegir tu conjunto, te recomiendo investigar un poco sobre la clínica o el centro donde te entrevistarás. ¿Tienen una cultura más tradicional o más moderna? Puedes echar un vistazo a su página web, a sus redes sociales, o incluso si puedes, pasar por la zona para ver cómo visten los profesionales allí. Esto te dará pistas muy valiosas. Por ejemplo, una clínica deportiva de vanguardia quizás acepte un estilo un poco más relajado y moderno que una clínica de rehabilitación en un hospital público. En mi primera entrevista, hace años, cometí el error de ir demasiado formal a una clínica pequeña y familiar, y me sentí un poco fuera de lugar. Aprendí que la adaptabilidad es una gran cualidad. No se trata de camuflarse, sino de mostrar que entiendes el ambiente y que puedes integrarte perfectamente. Siempre es mejor pecar un poco de formal, pero sin llegar a lo exagerado, que ir demasiado informal. El objetivo es que tu ropa te ayude a encajar y no a destacar negativamente.

Advertisement

Colores que Hablan por Ti: Psicología del Vestir en la Entrevista

Tonos Clásicos y su Significado

La elección del color de tu atuendo puede influir sutilmente en cómo te perciben. No es magia, es psicología pura, ¡y funciona! Colores como el azul marino, el gris y el negro son apuestas seguras. El azul marino, por ejemplo, transmite confianza, lealtad y profesionalismo, y es un color muy bien aceptado en entornos de salud. El gris denota sofisticación, estabilidad y equilibrio, perfecto si quieres proyectar una imagen serena y competente. El negro, aunque muy elegante, a veces puede parecer un poco severo o distante, así que úsalo con moderación, quizás en un blazer o en un pantalón combinado con una blusa de un color más suave. Los tonos neutros como el beige o el crema también son excelentes opciones, ya que transmiten accesibilidad y calidez, algo muy valioso en fisioterapia. Personalmente, me decanto mucho por el azul marino, siento que me da una energía profesional pero a la vez cercana, que es exactamente lo que busco en mi interacción con pacientes y colegas. Eviten los colores demasiado brillantes o estampados estridentes; queremos que el enfoque sea en ustedes y sus habilidades, no en un diseño llamativo.

Evitando Distracciones Cromáticas

Mientras que los colores clásicos y neutros son tus aliados, algunos tonos pueden ser verdaderos enemigos en una entrevista. Los rojos intensos pueden ser interpretados como agresivos o demasiado dominantes, lo cual no es ideal para una profesión que requiere calma y empatía. Los amarillos brillantes o los verdes fluorescentes, aunque quizás te encanten para el fin de semana, pueden distraer al entrevistador y restarle seriedad a tu imagen. La clave es la moderación. Si te gusta un color más vibrante, puedes incorporarlo en un pequeño detalle, como un pañuelo discreto o un accesorio sutil, pero nunca como el protagonista de tu conjunto. Recuerdo una vez que una candidata llegó con una blusa de estampado floral enorme y colores muy vivos. Aunque su currículum era excelente, durante la entrevista me costaba concentrarme en lo que decía porque mis ojos se iban irremediablemente a su ropa. ¡No queremos eso! Queremos una imagen que complemente tu mensaje, no que compita con él. Tu personalidad debe ser el color más brillante en la habitación.

Color Mensaje Proyectado Recomendación para Fisioterapeutas
Azul Marino Confianza, Lealtad, Profesionalismo Excelente para trajes, blazers, pantalones o faldas.
Gris Sofisticación, Estabilidad, Equilibrio Ideal para un look pulcro y moderno, en cualquier prenda.
Negro Elegancia, Autoridad Usar con moderación o combinar con colores más suaves para evitar severidad.
Beige/Crema Accesibilidad, Calidez, Cordialidad Perfecto para blusas, pantalones, o chaquetas ligeras.
Blanco Limpieza, Pureza, Simplicidad Buena opción para blusas o camisas, siempre impecable.

Los Detalles Pequeños que Hacen una Gran Diferencia

El Toque Final: Accesorios y Peinado

Una vez que tienes la ropa base elegida, es el momento de pensar en esos “extras” que pueden elevar tu look o, por el contrario, arruinarlo. En cuanto a los accesorios, ¡menos es más, siempre! Un reloj clásico, unos pendientes pequeños y discretos, o un collar sencillo pueden añadir un toque de elegancia sin distraer. Evita joyas demasiado ostentosas, ruidosas o que puedan engancharse. Recuerda que en fisioterapia, a menudo hay contacto con el paciente, y quieres que todo en ti proyecte profesionalidad y cuidado. El peinado también es crucial. Un cabello limpio, bien peinado y recogido (si es largo) o cortado de forma ordenada es fundamental. Nada de peinados extravagantes o que te obliguen a estar constantemente ajustándotelos. Queremos que tu cara esté despejada y que tu mirada transmita seguridad. En mi experiencia, una coleta baja o un moño sencillo si tienes el pelo largo siempre funciona, o si lo tienes corto, que esté bien arreglado y lejos de la cara. Estos pequeños detalles demuestran que te has tomado el tiempo para cuidar tu imagen y que eres una persona atenta.

Manos y Uñas: La Herramienta Principal

Este es un punto que a menudo se pasa por alto, ¡y es vital para los fisioterapeutas! Nuestras manos son nuestras herramientas principales, nuestro contacto directo con el paciente. Por eso, deben estar impecables. Las uñas deben estar limpias, cortas y bien limadas. Si eres mujer y te gusta llevar esmalte, opta por tonos neutros o una manicura francesa, que se vean cuidados y discretos. ¡Nada de uñas postizas largas o esmaltes descascarados! Esto no solo puede dar una imagen de descuido, sino que también podría ser un foco de infecciones o incluso molesto para el paciente. Los hombres deben asegurarse de que sus uñas estén bien cortadas y limpias. Y, por supuesto, una buena hidratación de las manos. Recuerden que la piel sana también es parte de una imagen cuidada. Cuando el entrevistador te estreche la mano, que sienta una mano cuidada y profesional. Este detalle tan específico de nuestra profesión es un reflejo directo de tu higiene y tu atención al detalle en tu trabajo.

Advertisement

Comodidad y Confianza: Tu Mejor Aliado en el Proceso

물리치료사의 취업 면접 복장 - **Prompt:** A poised male physiotherapist, in his early 30s, standing with an air of professional ea...

Eligiendo Telas y Cortes Adecuados

La comodidad no debe sacrificarse por la elegancia, especialmente en nuestra profesión. De hecho, ¡son aliadas! Si no te sientes cómodo con lo que llevas puesto, se notará en tu lenguaje corporal, en tu forma de sentarte, de gesticular. Esto puede restarte puntos de confianza. Opta por telas que no se arruguen fácilmente, que sean transpirables y que permitan el movimiento. Materiales como el algodón, las mezclas de poliéster de buena calidad o el lino (bien planchado) son excelentes. Evita la ropa demasiado ajustada o demasiado holgada. La ropa debe quedar bien, sin apretar, permitiéndote respirar y moverte con facilidad. Piensa en el recorrido hasta la entrevista, en el tiempo que pasarás sentado, quizás en la posibilidad de tener que demostrar alguna habilidad (aunque es raro en una primera entrevista, nunca se sabe). Un buen corte en un pantalón de tela, una blusa que no te apriete en los hombros, o una chaqueta que no te restrinja el movimiento de los brazos. Una vez, un compañero me contó que en su entrevista se puso una camisa tan ajustada que no podía levantar los brazos cómodamente, ¡y tuvo que dar una pequeña demostración de un ejercicio! La incomodidad era evidente. Aprendamos de esas anécdotas.

Practicando la Comodidad

Mi consejo personal: pruébate el conjunto completo que piensas usar unos días antes de la entrevista. Ponte los zapatos, siéntate, levántate, camina un poco. Asegúrate de que los zapatos son cómodos y que no te harán daño. Nada de estrenar zapatos el día de la entrevista, ¡por favor! Recuerdo una candidata que llegó a la entrevista con unos tacones preciosos, pero evidentemente incómodos. Su incomodidad era palpable. Constantemente se los quitaba y ponía debajo de la mesa, y eso, aunque pequeño, resta profesionalismo y concentración. Queremos que tu ropa te empodere, no que te esclavice. Si sientes que la ropa te distrae, es la señal de que algo no va bien. La confianza que emanas cuando te sientes bien en tu propia piel (y en tu ropa) es algo que los reclutadores perciben. Esa seguridad se traduce en una actitud más relajada, una voz más clara y una mejor capacidad para concentrarte en lo que realmente importa: tu mensaje y tu personalidad. Tu atuendo debe ser como una segunda piel, que te permita ser tú mismo, pero en tu versión más pulcra y profesional.

Errores Comunes a Evitar para no Tropezar

El Exceso y la Negligencia

Es muy fácil caer en los extremos, y ambos son perjudiciales en una entrevista. Por un lado, tenemos el “exceso”: ropa demasiado llamativa, joyas excesivas, maquillaje recargado o perfume muy fuerte. La idea no es que tu imagen sea lo único que el entrevistador recuerde. Queremos un look pulcro y profesional que te complemente, no que te quite el protagonismo. He presenciado entrevistas donde el perfume del candidato era tan intenso que era casi imposible concentrarse en la conversación. ¡No queremos eso! Por otro lado, la “negligencia” es igual de grave: ropa arrugada, sucia, descosida, zapatos sin lustrar, pelo sin peinar. Esto envía un mensaje claro de falta de interés y de atención al detalle. Piensen que el reclutador proyectará esa imagen a cómo serías en el trabajo. Si no te cuidas para la entrevista, ¿cómo cuidarás a los pacientes? Un error muy común también es la ropa que no es de tu talla, ya sea demasiado grande o demasiado pequeña. Esto hace que te veas desaliñado o incómodo, y ninguna de las dos cosas es lo que buscamos. Prestar atención a estos pequeños detalles es crucial y demuestra tu compromiso.

Preguntar Siempre es Válido

Si realmente tienes dudas sobre el código de vestimenta de la clínica, ¡no dudes en preguntar! Es mucho mejor aclarar la situación que presentarte de forma inadecuada. Cuando te llamen para confirmar la entrevista, puedes preguntar algo tan sencillo como: “Disculpen, ¿hay algún código de vestimenta específico para la entrevista o el ambiente de la clínica?” Esto no solo resuelve tu duda, sino que también demuestra que eres una persona proactiva y que te preocupas por presentarte de la mejor manera posible. A veces, las empresas tienen una cultura muy definida y apreciarán que hayas preguntado. En mis años de experiencia, he visto cómo un simple correo electrónico o una llamada para resolver estas pequeñas incógnitas ha marcado la diferencia para algunos candidatos. No lo vean como una debilidad, sino como una fortaleza. Demuestra madurez y una actitud orientada al detalle, dos cualidades muy valoradas en cualquier profesional de la salud. Es mejor prevenir que lamentar, y en este caso, una pregunta a tiempo puede salvarte de un momento incómodo o de una mala primera impresión.

Advertisement

Preparación Final: Un Último Vistazo al Espejo

La Noche Anterior Importa

La preparación para la entrevista no empieza esa misma mañana, ¡sino la noche anterior! Prepara todo tu atuendo: la ropa limpia, planchada y colgada, los zapatos limpios y lustrados, los accesorios listos. Esto te ahorrará muchísimo estrés el día de la entrevista y te permitirá concentrarte en repasar posibles preguntas o en relajarte. Asegúrate de tener tu bolso o cartera organizado, con tu currículum impreso (aunque ya lo hayas enviado, siempre es bueno llevar una copia), una libreta y un bolígrafo. Dormir bien esa noche es tan importante como la ropa. Un rostro descansado y una mente despejada son tus mejores aliados. Una vez recuerdo que dejé todo para última hora y por la mañana me di cuenta de que mi camisa favorita tenía una mancha que no había visto. ¡Fue una odisea conseguir otra a tiempo! Desde entonces, la noche anterior se ha convertido en mi ritual sagrado de preparación. No subestimen el poder de una buena planificación. Te dará una tranquilidad invaluable y te permitirá abordar la entrevista con una actitud mucho más positiva y serena.

Un Consejo Final para Brillar

Más allá de la ropa y los accesorios, lo más importante que puedes llevar a una entrevista es tu actitud. Una sonrisa genuina, una mirada directa y un lenguaje corporal abierto son tan cruciales como tu vestimenta. Tu ropa es solo el envoltorio; lo que realmente brilla es la persona dentro. Recuerda que estás ahí porque tienes habilidades, conocimientos y una pasión por ayudar a las personas a través de la fisioterapia. Deja que esa pasión se vea. La confianza que proyectas cuando te sientes bien contigo mismo, cuando sabes que te has preparado a fondo, es inigualable. Y esa confianza es magnética. Así que, una vez que te hayas vestido con cuidado, mírate al espejo y regálate una gran sonrisa. Di en voz alta: “¡Voy a hacerlo genial!” Siente esa energía. Esa es la chispa final que hará que el reclutador no solo se fije en tu atuendo, sino en la persona increíble y profesional que eres. ¡Vamos a conquistar esas entrevistas y a seguir transformando vidas con nuestra profesión!

Para Concluir

¡Y así llegamos al final de este recorrido sobre la primera impresión! Espero de corazón que estos consejos les sirvan de guía y les aporten esa dosis extra de seguridad que todos necesitamos en momentos clave. Recuerden que más allá de la tela y el diseño, lo que realmente importa es la autenticidad y la pasión que transmiten. Vístanse con la intención de proyectar lo mejor de ustedes, porque cada detalle cuenta y habla por sí mismo.

Advertisement

Información Útil que Debes Conocer

1. Investiga siempre la clínica o centro antes de tu entrevista para entender su cultura y código de vestimenta. Una pequeña búsqueda en línea puede darte pistas valiosas.

2. Prepara tu atuendo completo la noche anterior: ropa planchada, zapatos limpios y todos los accesorios listos para evitar prisas y estrés el día clave.

3. Prioriza la comodidad sin sacrificar el profesionalismo. Si te sientes bien con lo que llevas, tu lenguaje corporal lo reflejará positivamente.

4. Lleva siempre una copia impresa de tu currículum, un bolígrafo y una libreta. Demuestra organización y preparación, incluso si te han dicho que no es necesario.

5. Practica tus respuestas a posibles preguntas comunes y ten preparadas algunas preguntas para el entrevistador. Esto muestra tu interés y proactividad.

Resumen de Puntos Clave

En resumen, la primera impresión es un factor decisivo en cualquier entrevista de fisioterapia. Vestir de forma adecuada no solo demuestra respeto por la oportunidad, sino que también proyecta profesionalismo, confianza y atención al detalle. Opta por un estilo “smart casual”, elige colores neutros que transmitan confianza, y no olvides la importancia de los detalles como el peinado, las manos y los accesorios discretos. La comodidad y la confianza son tus mejores aliados, permitiendo que tu personalidad y tus habilidades brillen por encima de todo. ¡Prepárate con antelación y muestra la mejor versión de ti!

Preguntas Frecuentes (FAQ) 📖

P: iensen en esto: somos fisioterapeutas, nuestra profesión es dinámica, práctica, y a menudo estamos en movimiento. Un traje completo, aunque transmite formalidad, a veces puede parecer un poco rígido o incluso poco práctico para lo que se espera de un fisio. Lo que buscamos es proyectar profesionalidad, seriedad, pero también cercanía y adaptabilidad.Yo, personalmente, para una primera entrevista, suelo recomendar algo como un pantalón de vestir (no vaqueros, por favor, ¡ni los más oscuros!) o una falda lápiz de un color neutro (gris, azul marino, negro), combinados con una blusa o camisa elegante. Para los chicos, un pantalón de vestir, una camisa bien planchada y, si el ambiente de la clínica es un poco más formal, un blazer o una americana sin corbata. Esto demuestra que te tomas la entrevista en serio, que respetas la institución, pero que también entiendes la esencia práctica de nuestra labor. He visto cómo muchos candidatos brillan justamente porque su atuendo, sin ser excesivamente formal, les permite proyectar confianza y una imagen pulcra, sin que la ropa “hable más fuerte” que sus palabras o habilidades. Es ese toque que dice: “Soy competente y sé dónde estoy”.Q2: Considerando que la fisioterapia es práctica, ¿cómo elijo zapatos y accesorios que sean profesionales y cómodos a la vez?A2: ¡Excelente pregunta! Esta es una de esas cositas que, aunque parezcan menores, marcan una diferencia enorme.

R: ecuerden que en fisioterapia, muchas veces tendremos que levantarnos, mostrar un movimiento, o incluso evaluar algo en el momento. Por eso, la comodidad es tan importante como la profesionalidad.
En cuanto a los zapatos, mi consejo es siempre optar por algo cerrado, limpio y de tacón bajo o plano. Para las chicas, unos bailarinas elegantes, mocasines o unos zapatos de tacón sensato (de no más de 3-4 cm) son ideales.
Eviten las sandalias abiertas, los tacones de aguja o cualquier cosa que haga ruido al caminar o que pueda dar una imagen informal. Para los chicos, unos zapatos de vestir limpios y pulcros son perfectos.
Lo importante es que, si te piden levantarte, puedas hacerlo con agilidad y sin sentirte incómodo o preocupado por tu calzado. Directamente lo he comprobado, un par de zapatos cómodos y apropiados te dará una confianza extra en esos momentos.
Respecto a los accesorios, menos es más. Un reloj discreto, unos pendientes pequeños y sencillos, o un collar delicado son más que suficientes. Eviten las joyas grandes, ruidosas o que distraigan.
No queremos que la atención del entrevistador se desvíe por un brazalete que tintinea con cada movimiento o un collar demasiado llamativo. Y por favor, ¡manos y uñas impecables!
Como fisioterapeutas, nuestras manos son nuestra principal herramienta, así que asegúrense de que estén bien cuidadas. La idea es que todo lo que lleves complemente tu imagen profesional sin robarle protagonismo a lo más importante: ¡tú y tus habilidades!
Q3: ¿Hay colores que debo priorizar o evitar para causar la mejor impresión en una entrevista de fisioterapia? A3: ¡Ah, el poder de los colores! Es algo que subestimamos, pero que tiene un impacto psicológico tremendo en cómo nos perciben.
Para una entrevista de fisioterapia, mi recomendación es inclinarse por la paleta de colores neutros y sobrios. Los colores como el azul marino, el gris (en sus diferentes tonalidades, desde el claro al marengo), el beige y el blanco (para camisas o blusas) son tus mejores amigos.
Estos colores transmiten confianza, seriedad, profesionalidad y fiabilidad. El azul marino, por ejemplo, es excelente porque proyecta autoridad sin ser agresivo y, a la vez, es un color que a menudo asociamos con el ámbito de la salud.
El gris es sofisticado y versátil. Si quieres añadir un toque de color, hazlo de forma sutil. Una blusa en un tono pastel, como un azul cielo suave, un rosa palo o un verde menta muy tenue, puede aportar calidez y cercanía sin restarle seriedad a tu atuendo.
Para los hombres, una corbata (si decides usarla, aunque como dije antes, no siempre es necesaria) con un estampado discreto que incluya alguno de estos colores puede funcionar.
¿Qué colores evitar? Bueno, en general, los colores demasiado llamativos o saturados como el rojo brillante, el naranja flúor, o el amarillo chillón. Aunque en el día a día pueden ser divertidos, para una entrevista tienden a distraer o a dar una imagen menos sobria.
Tampoco son ideales los estampados muy grandes o recargados. La idea es que tu vestimenta sea un lienzo discreto que permita que tu personalidad, tu experiencia y tus conocimientos brillen con luz propia.
Recuerden que queremos que el entrevistador se concentre en ustedes y en lo que tienen que ofrecer, no en el color vibrante de su camisa.

Advertisement